- ACASO EN NOVIEMBRE -
Pudo ocurrir en noviembre,
fondeando inmerso el amarillento otoñal,
sin que tuviésemos que volver la cabeza
al margen de los que fuimos,
viento,
tomados del brazo de una cálida resultante
que nos relamía a presentes entre copas,
entre alientos desfigurados al instante.
Las calles dejaban de reconocernos sin hipar,
sin aspavientos ridículos que nos velaran,
siendo sólo ellas noticia, el espaciado redoble
que infringía al gastado cauce anegado
los rastrojos que atrás fueron pasos.
Todo pudo ser espejismo diferente,
casi anhelado,
tan tácito e inadvertido habitual,
una ruptura que no nos increpó al ocaso.
Atardecimos hasta erupcionar en sombras,
quizás,
calmos y tersos al rutilar de las pupilas,
olvidados de una tan ajada formalidad
que previó un retal colmado de sietes.
Kabalcanty.copyright©
(Pintura de Edgar Noé Mendoza)