Mis ganas de amarte son rebeldes
Y no ceden al olvido de los días pese a tu lejanía
Aún tengo esperanza que se cansa y fatiga
Ante la intriga del abismo
Del sí y ya no somos los mismos
Yo volvería a enamorarte ¿cuánto daría? por tu abrazo,
Cuando rechazo drogarme y el atardecer parece un suicidio
Y yo no tengo dios nunca dijimos adiós
Nos veremos pronto reparando con un beso al tiempo roto.