Porque nace antes el día, A orillas de su espuma, Tiene el alma joven, viajera, Ojos verdes de mujer. Porque en mis juegos Ella fue la cuna, Que meció mi párvulo latido Y de sus labios, el sabor profundo De mi primer beso nocturno Porque a lomos de sus vientos Sobre cristales rotos e invencibles Con mi nao de papel navegué sin rumbo Allá donde yo me hice hombre, Ella, me quiso hacer su poeta. Porque sobre su carne No ha nacido aún la rosa Que diga: !te he vencido la belleza! Ni raíces que hundan su dominio La primavera de su faz, es siempre continua Siempre victoria de los ríos secos Porque mamo de sus aires La asfixia que me ancla entre sus pechos Uno de Luna Otro de ortos claros y únicos. Porque mi casa solo tiene ventanas azules Que alimenten mis ojos de sur Mi cuerpo solo puede ser de arena Solo puede ser poesía salada, De sueños marineros.