Ella, yo, ambos sentados tomando café.
Sonreí; le tiré el café en toda la cara.
Estupefacta y sin reacción alguna se quedó.
¿Qué pasó? Respuesta simple: el café, estaba amargo.
¿Y ella? Ella también, su sabor ya no es igual que antes.
Ella, yo, ambos en la cama tomando café.
Acarició mi rostro, volví a tirarle el café encima.
No dijo nada, en silenció se quedó.
¿Qué pasó? Respuesta simple: el café, estaba frío.
¿Y sus caricias? Tan frías como un témpano de hielo.
Ella, yo, sentados en la azotea tomando café.
Dejó el café y me abrazó; me alejé de ella y me fui.
Mi taza quedó vacía, y ella...llorando.
¿Qué pasó? Respuesta simple: terminé de tomar café.
¿Y ella? Ella aún sigue tomando café, pero esta vez; sola.