Ahora que soy el vertiente polvo de cenizas.
Mañana que me preciso en escondidas sonrisas,
en música silenciada de sentimientos.
Ahora que me visto corporalmente de oscuridad y miseria.
Ahora que divago en el rezo,
imaginadamente entre el agua y la misma tierra.
Ahora y mañana sin un brillante suelo que ilumine mis pasos,
ayer y ahora tatuado de blanco.
Ahora que la música es el nuevo roce de las olas y
mañana un vacío puro de corazón,
mientras tengo los ojos a la luz de vida ajena.
Ahora que soy el vacío inerte de un nicho,
y ayer que era una desquebrajada familia, de mi diurno interior.
Vacío del vacío a contra ventanas,
a contra inexplicables sueños,
vacío lleno de palabras en oración,
vacío intocable, invisible, del polvo de cenizas al aire, al cielo...
Soledad amarga que contempla
el eco fugaz de una emergencia tan ajena,
como la estrella soñada.
Y estas palabras de reciproco recuerdo,
son el triste y místico silencio del ayer,
y se clava en el ahora, mañana y en el sublime después.
Todos los derechos reservados,2009©BryanGómez