Entre tus ojos y los mios
se detendrá el universo
como el vuelo de un colibrí.
Que será de las nubes
y que harán las monedas
calentadas en la mano del avaro.
Que hará el cantor
enmudecido
y el pecho lleno de palabras.
Como esas no dichas jamás
o aquellas vacías de amor
repetidas sin pudor.
Que será del disparo
que no llega
sabiendo a quién espera.
Entre tus ojos y los míos
el universo se ha detenido
en un silencio lento.
Solo nuestro beso iniciará
el nervioso vuelo
del fabuloso colibrí.
Dejando oir
el tintineo
de las monedas al caer.
Del encuentro ansiado
de la carne
ante ese disparo.
Y de todas las pequeñas cosas
detenidas, como el canto
y las mil palabras dichas.
Solo el beso
enciende la vida
detenida en nuestra mirada.