Dicen que cuando enamorada estás,
miles de mariposas revolotean
dentro de tu disfraz.
Miles de mariposas revolotean,
pugnan por escapar,
escapar de ti.
Escapar hacia él.
Dicen que cuando enamorada estás,
miles de mariposas revolotean
dentro de tu disfraz;
pero
¿Cual es su disfraz?
Algunas,
comprenderán,
de amor se disfrazan.
Algunas,
vestirán,
ropas rojas de ilusión.
Algunas,
serán
entrega total a él.
Algunas,
te empujarán
a darle todo lo bueno en ti.
Otras,
lógico será,
de miedo vestirán.
Temblarás,
si a tu amado amenazan.
Llorarás,
si disputan.
Sufrirás
por no tenerlo a tu lado.
Entonces recordarás
amar duele,
y solo así sirve amar.
Otras tantas,
de ilusión vestirán.
Esas ganas,
desesperadas de saber como vivirán.
Esas ganas,
de verlo llegar
Esa invariable situación
de soñar,
con morfeo o entre los mortales:
con su nombre,
con su piel,
con él.
Te recordarán
que no sólo tú lo miras,
que no sólo tú lo anhelas,
que no sólo tú lo idolatras,
que no sólo tú lo amas.
Y llorarás una vez más,
porque el amor de verdad duele.
Y llorarás una vez más,
porque sólo así se debe amar,
amar de verdad.
Dicen que cuando enamorada estás
miles de mariposas revolotean,
dentro de tu disfraz.
Miles de mariposas revolotean.
Pugnan por escapar,
escapar de ti.
Escapar hacia él.
Dicen que cuando enamorada estás
miles de mariposas revolotean
dentro de tu disfraz
pero
¿Cual es su disfraz?
La vida no me alcance quizás
para descubrirlos todos.
Pero
todas te dirán:
tu sonrisa es él,
es él sonriendo.
Tu triunfo es él
es él triunfando.
tus sueños son él,
él a tu lado.
Te dirán,
aunque no escuches,
tu futuro es él.
Te dirán,
escrito está:
enamorada estás.