Vuelve tus ojos a mí, ¡mírame!
Mírame y llora amargamente;
Fui fuego y me he consumido,
De entre las cenizas intento revivir,
No lo he de lograr nunca más,
Ya no seré fuego solo brazas que ardieron y nada mas,
Solo un vestigio de algo que brillo
Me dijiste que era un fénix;
Siento decir esto pero… no lo soy.