No destruyas el camino de regreso,
no se te olvide que alguien te nombra.
Sé que hemos tenido días alejados
el uno del otro y viceversa.
Hoy también mis manos te nombran
y sé que en mi ausencia
hay una sonrisa que pronuncia mi piel.
Nos sabemos tanto amor,
que no hay necesidad
de destruir el camino,
así estemos con tanta ausencia.