Es el amor una quimera hermosa
Una sustancia que brilla en las penumbras,
Es un llanto que sonríe
Y se ríe como un loco condenado
Un demonio del abismo que llora azufre de pena
Pena de amor.
Pero es también el ángel de la alegría
Es cristal frágil
Que en toscas manos reposa
Las manos de un triste carpintero
O las de un hada que nostálgica llora
Que más se podría decir
Que es la tarde atravesando el mar?
O quizás la luna muriendo en lealtad al tiempo
Es a veces un sacrificio voluntario
Otras veces la pena de la obsesión
Llantos amargos que se burlan de los enamorados,
Sangre que desangra un puro corazón,
Que se sacrifica cada día como el sol,
Martirio de un atardecer