Voy a escribir los poemas que hablan de tu hermosura,
de tu graciosa figura, de tu ser ¡Sotaventina!
Que por la gracia divina, te hizo novia del sol
y te cubrió con amor.
Yo vengo de la tierra ardiente
donde las caras sonrientes te reciben con agrado.
donde el yugo y el arado marcaron nuestros senderos
Despues se volvió rielero tu venir y tu andar
donde hay amigos sinceros.
¡Soy de la tierra, de la jarana y del son!
donde se da el corazón en un abrazo sincero.
La de las manos de Diosa
En esta tierra gloriosa marcaron nuestros destinos
donde se cruzan los caminos de la caña y el maíz.
¡Tierra soberana!
que recibió con amor a los que del sol llegaron.
¡Caras alegres¡ ¡Manos hacendosas!
las del pintor y el jaranero,
las del maestro y obrero
que construyeron el futuro de los años venideros.