Con el rostro taciturno, pasos cortos y el mirar sereno
El se encamina a la iglesia, para pedirle al Nazareno
que no se lleve a su Juana, a su adorada esposa
quien tendida en una cama, llena de dolor, reposa…
Ella es su mujer, su compañera eterna, su alegría
su amada desde la infancia, hasta este último día
que la parca cruel, emisaria de la muerte, a llegado
a robarle a su Juana, a apartarla de su lado…
Con el rostro iluminado, pasos cortos y el mirar sereno
El va saliendo de la iglesia, de pedirle al Nazareno
que no se lleve a su Juana, a su adorada esposa
quien tendida en una cama, llena de dolor, reposa…
El es un hombre sencillo, trabajador y muy fuerte
pero no atinaba que hacer, ni como vencer a la muerte
que no le robara a su Juana, y ya tiene un halo de luz
porque confía en aquel, que por amor murió en la cruz…
Ella se llama Juana…y vive feliz con El…
CAZA
04/03/2014