como un p0bre niño en un caball0 de cartón
que sabe alardear para distinguirse del montón
llega la noche y se va a llorar a un rincón,
para que nadie le invada de consolación.
Día tras día saluda a los trabajadores que se desplazan en camión,
se lo toma todo con mucha tristeza pero con demasiada diversión,
nadie sabe lo que sufre y por él va esta canción,
él puede contra todo, superando su emoción.
ya no contactamos,
pues él se marchó en avión,
se fue llorando,
y a todos se olvidó.