LA VOZ DEL JOVEN
La voz del joven salía
y del bosque se alejaba,
y el eco se la llevaba,
y en silente se dormía
la voz de joven volvía,
y su boca resonaba,
y el sonido ya volaba,
mas la boca se cernía
de aquel joven que lanzaba,
el timbre que en él moraba.
Tantas veces repetía
que el joven se divertía,
y desde su alma pensaba
muy contento que jugaba,
en el bosque en que vivía,
mas el zagaleto un día
vio la voz que él lanzaba,
y que el éter la llevaba
mas con él se moriría,
pues su voz ya no sonaba.