Escalofríos de fósforo en fuego
multiplicándose, invaden mi cuerpo
acelerando en ardiente bullicio
mi voz, mi latir, platicando a tu cuerpo.
Y, ya mis labios y lengua en denuedo
intrepidez de mi alma en su celo
con tu embrujo y primor has vencido
en esta batalla de amor manifiesto.
Has sido tú, y serás lo que quiero
alma gemela, nadando en mi puerto
en tu bahía mi alma he sumido
zarpando mi barca, con delirio avelo.
Llévame a ínsulas, islas de ensueño
a esas playas de arrecifes plenos
donde el sol y su luna han nacido
en los paisajes de arena y desvelo.
Sola en tu isleta morir yo deseo
en sus llanuras salvajes de cielo
en sus espumas de mares paridos
¡en su dolor, delicioso escarpelo!
Copyright© 2014 Rocío Vega-Ponce