Las nubes estan pintadas de rubio
entre el claro y oscuro del cielo,
yacen los pinos rayados por la tenue luz,
los pajarillos acurrucados en sus ramas
con melódico canto reciben al día,
y mi alma abandonada en el alba
recita mil frases de tu ausencia.
¿A donde has ido? si en tu viaje alado te pierdes
sigue mi lecho solitario y vacío,
las sabanas heladas ya no alientan los sueños,
me siento helado y abandonado
como el ártico norte,
como los sueños transitorios de un ermitaño,
y sigo entre nieblas caminando a ciegas.
Ha traído tu aroma el viento del oeste,
has perdido la fragancia del amor;
quizas esté en otro lado,
no muy lejos de acá,
respiro agonía en pesares de tristeza.
La alborada es anaranjada a lo lejos,
a veces un poco oscura en el firmamento,
el despertar sin los sueños me deja herido,
ya siento que te he perdido hasta en los sueños.
Abandonado como una isla desierta,
hace tiempo que no enclavan tus ojos en mis riveras,
las costas donde navego estan solitarias,
quisiera subirte a mi enbarcación,
echar raices en tu corazón,
dejar de ser el abandonado del amor
y lucir radiante en el destello del alba.