A su Santidad el Papa Francisco
Usted Francisco es la voz de los rojos
la voz verdadera que maravilla
al mundo bermellón,
y que sigue los pasos
de Cristo misericordioso,
el hijo de Dios.
Por ello,
la voluntad de Cristo es soberana
y llevar su cruz
se hace más ligera y liviana
si va acompañada
de nuestro Dios salvador.
Usted Francisco,
siempre tiene la belleza
en su palabra,
que atesora un corazón rojo
de libre pensador,
en ése Jesús
que es nuestro liberador.
Tus ojos son la verdadera luz
que nunca será transitoria,
efímera,
sino que es eterna
y nos ilumina con sus acciones
y con su catecismo,
y que nos da la armonía de vida
tan necesaria.
Usted Francisco tiene la pureza de Cristo
y sus virtudes eternas,
cuando recibe mendigos en el Vaticano
con su corazón misericordioso,
y le doy las gracias por ello,
porque Usted es revolucionario
al igual que yo,
y como lo es también
mi hermoso futuro esposo,
el Dr. Lys.
Su misión es la unión del cielo
con los fieles de la tierra
en el amor por siempre de Dios,
bebiendo en su Fuente Divina,
de roja comunión
que comparte
el Comunismo de Cristo.
Usted Francisco
es un cristiano comunista
por la Gracia de Dios.
Autora: Marie Clémentine