franco berlusconi

carta al capitan smith

Un día de repente desperté, y todo había cambiado, el mundo había cambiado….el amor había cambiado, mi cuerpo había cambiado, y de repente no entendí de pronto y así no mas…de golpe….como se quiebra el cristal más fino al estrellarse en la superficie dolorosa, como  llega el día después de una intensa noche, sin más ni más, sin por que,  sin explicación, mi mundo….se había derrumbado, y quizás recién comenzaba a darme cuenta del vivido daño, del dolor en todo lo abstracto, en esas poesías enfermas, y en esas noches largas enfermas de espera, y trate de concentrarme en la esperanza, en la narrativa que antes le daba a mi vida, y solo logre estrellarme con la realidad más dura y clara, cuando sucedió todo????, cuando se fue mi madre…..???? en azogue misterioso y loco, cuando converse cara a cara con la muerte en un triste encrucigrama de fracasos intrincados y misteriosos, que pasaron frente a mi uno a uno tan profundos tan ostentosos, como en un hermoso desfile de modas, de modas rotas y tristes a través de todos los años, cuando comencé a sentir el sabor más amargo de la derrota, mezclado con las insinuaciones perversas de la amargura, que aun me deja un sabor desgarrado en la adolorida garganta, que se inflama de tanto callar el odio que ahora viene a mi alma, se va el día y se muere con el sol, y se va mi vida, perdido así como un barco en mitad de la tarde, en un mar brillante , inmenso y silencioso, y en las olas se quedaron encerradas, mis ilusiones desatadas, pero prisioneras entre la espuma burbujeante y loca,  las ilusiones desmedida de un adolecente solitario y misterioso, que ahora no es más que un hombre que de repente envejece, en la soledad mas infinita, y en la pobreza mas grande, permitiendo el tiempo tanto sufrimiento, en una sociedad mafiosa y secreta, se va mi vida, se me va todo……se nos va todo iiiiiiiiiiiiiiiiii