Quiero que tú
seas la musa
que alivie con mucha ternura,
de mi alma,
la escaramuza
que lastimándome perdura.
Que alejes
con tus caricias
la soledad que me apena,
me des sueños y albricias
que se alejaron
por mi pena.
Quiero atrapar
la luz de tu mirada
para alumbrar mis desvelos,
tenerte por siempre ilusionada,
que nunca
conozcas los recelos…
Dibujando esa sonrisa tierna
con dos hoyuelos en tu cara,
que digas con cariño: mi cielo,
como si de tu alma brotara.
Quiero que tú
seas la mujer
romántica y soñadora
que deseo siempre tener
y me alumbres
como radiante aurora.
Que beses mis labios
con pasión,
que me abraces
con firmeza,
que envuelvas
a mi corazón
con ternura,
con delicadeza…
Siempre soñar
enamorados
que aun vale la pena querer,
borrando oscuros pasados,
confundirnos
de amor y placer.
Recibe este humilde cántico,
que tus ojos lo lean
para tenerte conmovida,
del poeta más romántico
que has conocido
en tu vida…
José Bernardo Romero Núñez
BERNA