Un torrente verde
cual si fuese un jade,
de tu pecho emana
naturaleza, madre.
Un estruendo azul,
zafiros y diamantes
y en tu vientre el hombre
tú, mi tierra madre.
Tan sentida ausencia,
tu por siempre en vela,
ambar, cuarzo y jade,
es mi madre selva,
Misteriosas formas
de manifestarte,
desde un manto negro,
hasta un sol brillante.
Y aunque hombres todos,
solo el Popo sabe,
que sin Iztaccihualt,
solo son volcanes.
AL coloso llamo
por sentirse grande
que titán ha sido
por que tuvo madre.
Madre, madre madre ,
ese es el mantram,
me mantiene vivo,
pues gatié en sus palmas.
Feliz día, instante,
minuto atómico de nuestra nada,
bebita, niña, mujer, anciana,
feliz gracias mujer amada.