Recuerdo muy cerca mi niñez
estando tan lejos en el tiempo
y añoro cuando alguna vez
reía de lo que ahora siento
Reía sin saber porqué
desde el llanto hasta el silencio
y ahora que los pude ver
ya no río ... ¡me lamento!
Me lamento de este mundo infiel
... que a las hojas se las lleve el viento
o que el hombre, solo por placer
destruyendo todo, solo está contento
¿Qué será del trovero aquél
si se apagan el sol y las estrellas?
¿en que oscuro manto de mudez
morirá mi alma de poeta?
Y aprovecho a impulsar mi ira
derramando sangre en el papiro
y así vuelve a renacer mi alma
¡y del llanto y el silencio, río!