Este beso, no lo ha de borrar el tiempo,
tampoco intenta sellar tu boca,
pretende tal vez, ser sombra de tu aliento,
palabras del silencio, entre tus labios y los dedos.
Este beso, lleva del alma más que la idea,
la esencia organizada de un sentir desmedido,
fragancia de bocas, mundos, que finalizan la eternidad;
hasta eso tiene fin en un bello beso.
Este beso, simple mezcla de la soledad mía,
ruego de una ansiedad interna y profunda,
resurreción misma de la pasión oculta;
este beso, pues, desaloja los pesares,
deja buen sabor al inmortal pensamiento,
haya luz u oscuridad, habrá siempre amor en su encuentro.