Se para el pintor, frente a su lienzo
con mil y un colores, que va a plasmar
una obra de arte, un nuevo comienzo
de su don divino, que es saber pintar…
Se para el maestro, frente de su clase
con mil cosas nuevas, para entregar
lecciones eternas, que nadie olvidase
de su don divino, que es saber enseñar…
Se para el doctor, frente a su paciente,
con mil medicinas, que va a recetar
son horas y horas de lucha valiente
de su don divino, que es saber curar…
Se sienta una madre, junto a una cuna
con mil atenciones, que a su hijo va a dar
porque el amor de madre, vale una fortuna
de su don divino, que es saber amar…
CAZA
13/03/2014