Para Cármen
Tras las piedras de aire y sol
tras una explanada de nubes
se halla en majestad tendida.
Por las mañanas un vaho frío
le cubre de sedas transparentes
las iglesias reciben a las beatas del día.
Como un niño sigzagueante y alegre
está el Tomebamba, formando un dintel
que separa Cuenca de su cuenca.
Tu nombre tiene orientación de cruz
rima de trinos, rima de silbos.
Cuenca, pan y pluma de poetas
haz de aromas y vegetales
que da de beber a quien la mira
un tropel de acequias y de cantos.
Tras piedras de aire y sol
tras senderos y centurias de calzadas
la Historia ha hecho su emblema
de todo lo que pudo dar la ciencia.