Araceli Vellber

Magia.

Quisiera ser

Mago, para descubrir

De tu cara, tus engaños y tu daños

Quisiera ser

Espina clavada en tu costado

Para alimentarme de tu corazón helado

Reproducirme dentro de ti

Extenderme por tu campo

Recolectar de tu cuerpo, tu corazón a pedazos

Quisiera ser

De tu mano, tu esclavo

Acariciando tus senos, tu cara, tu risa

Conservarla en tarros de cristal añil

Y marcarlos con una etiqueta de tu sonrisa

Quisiera ser

De tu Ser, Ser amado

A ratos largos, o cortos

O tan solo dejarlos aterciopelados

Dentro del cajón de los sueños rotos

Quisiera ser lágrima

Recorrer de tu cara, tu mejilla

Salir de tus ojos con furia

Llegar hasta los pies

Y no poder ponerte de puntillas

Quisiera ser

Ciego, y ver con tu mirada tu cielo

Con tu imaginación, tu cuerpo

Ser de ti, tu alimento

Ser, tú de mi, mi aliento

Flores verdes para el encuentro

Los recuerdos apoyados en el suelo

Retorcidos nuestros dedos

En la enredadera del tiempo

Quisiera ser

Ser, atado a la vida

Con maromas de golosina

Dulces como el almíbar

Para comerlas las tardes frías

Llegar con el sabor dulce

A tu orilla

Dibujada en tus labios de agua pura cristalina

Quisiera ser

Alma esquiva de los malos presagios

De las impurezas amargas, de los engaños

Y contárselo a mi corazón temprano

Quisiera ser,

Tan solo, un ser humano

Quizás, eso ya no esté ni a mi alcance ni en mi mano

Por eso dije al principio, que sería Mago.