Rozo con mis labios tu boca
los cabellos se me alborotan
Exigo una mirada a tu rostro
Pero ese ángel se fue de su nido
Bellos ojos que miran el atardecer
de un bosque triste
o quizas un dulce oleaje que llega a mis costas
Rozo tus besos
bajo la medianoche
Y te ilumina ese eclipse
ese halo sobre tu cabeza
Tus cabellos devotos
hacen brillar la luna
y se mueven como olas a la merced
de un triste beso de un viajero
que llego a tu cuerpo
esperando ver contigo el amanecer