Johnny Rock

Carta sin dirección a una mujer.

 

 

Conocerte,verme reflejado en tus blancos dientes,tras haberme mordisqueado con ellos la lengua,compartir justo antes del amanecer de una noche de  verano,desnudos en tu terraza,sin pudor para todas las estrellas que se asomaban y escuchaban mi voz, mi guitarra y tus susurros, mientras soltábamos al viento las palomas blancas de todas nuestras ilusiones; ha sido una de las cosas mas bellas que me han sucedido.

¡Qué bello y corto viaje de astronauta!.Libres de la gravitación ,volábamos jugando  como niños con la nueva y divertida sensación de ingravidez, atravesando en la altitud todas las nubes.

Amanecimos un dia en el andén, ya vestidos y con los piés en el frio suelo , y nos dimos cuenta que no teníamos billetes, ni sabíamos con certeza el tren que debíamos coger.Solo equipaje.El  tremendo equipaje invisible del pasado,tan enorme y abultado que no había forma de deshacerse de él.Desparramado por el suelo ni siquiera nos dejaba acercarnos.

No sé donde fuimos tras aquel adiós que era como un bello arco iris intocable,tras la tormenta de pasión mojada, y los tornados frenéticos del sexo, que acumulaba,pero separado por sutiles bandas,todos los colores.

No sé donde estás,aparte de en mi mente. Incrementando el equipaje de este trayecto sin destino ni billete.

Pero a lo Frank Capra te diré : ¡Que bello es vivir ¡ ,añadiendo : ¡Que maravilla ese sueño inolvidable de verano.!