Mi soledad ya no es mía, ahora mis lágrimas son mi perenne compañía,
Muero de amor, muero por amar.
Muero de soledad desolada, de melancolía despiadada que me recuerda que sigo vivo.
Muero por amor y de amor...
Deseo sentir tu pesar, y olvidar tu desamor.
Deseo ahogarme en tus lágrimas, para recordar tu sentir.
Deseo desearte, deseo ser deseado.
Deseo vivir un día más para no perder el deseo de ser amado,
Aunque viviendo de deseo muera deseando.
Mi corazón sangra negro y mis palabras solo serán leídas con tristeza,
Es hora de callar mis palabras porque, si mi alma continuara hablando,
lo único que quedaría serían lágrimas para fertilizar tu mundo que alguna vez fue nuestro.