La vi contemplando el cielo
con una inmensa sonrisa,
levantando alegre vuelo
de manera firme y precisa.
La vi caminar alegre
avanzando a paso firme,
con una sonrisa leve
perfumando los jardines.
La vi acariciar la noche
la vi besar as estrellas,
y pintar el horizonte
con sus pinceles de seda.
La vi gritar en susurros
la vi mecerse con el viento,
y caer en sueño profundo
entre canciones y versos.
La vi alejarse serena,
la vi acercarse sonriente,
al vaivén de sus caderas
con su alma floreciente.
Autor: ALejandro J. Díaz Valero
Derechos Registrados
Bajo el Nro. 55620314
Maracaibo, Venezuela