Cuatro paredes encierran nuestro secreto, ¡cuidado amor! nuestros cuerpos han quedado impregnados, las huellas de nuestro encuentro apasiónado son tan evidentes que nos podrían descubrir, temo que se entere y de mi paraíso me haga salir, te entiendo, yo tampoco la quiero hacer sufrir, pero es tanto mi amor que no podría renunciar a ti, a tus besos, tus caricias, esas que de mi cuerpo me hacen salir, volar… enredada entre tus brazos, tocar el cielo pegada de tus labios, sentir el mundo a mis pies, dulce pecado, amor mío, amor ajeno, secreto de mil voces que comentan, que jamás sabrán, todo aquello que aquellas cuatro paredes guardan, cómplices de nuestro amor, de nuestra entrega sin igual.