Se me escapan del silencio
Vociferante las palabras, calladas,
Heridas; lesas, vocingleras.
Estentóreas, suaves, rutilantes;
Sucintas, lapidarias; deshechas letra por letra.
Se me escapan como un grito,
Dolidas e invencibles con su alma sentida.
Salen se refrescan,
Se pasean, regurgitan; se desahogan palpitan y se orean…
Dicen lo que dicen y suscitan,
Las palabras van y vuelven, retoman su silencio.
Se reciclan.
Hermes.