Es una nueva mañana, un nuevo día,
en el que no solo me concentrare en la dicha mía,
hay rostros caídos, miradas cálidas,
y tanto descuido...
Había dos partes que mis ojos veían
el cielo resplandeciente, los arboles moverse
el bello sol de otoño, y mas,
pero la vista fue bajando y se observa, el mundo
sanguinario que replica la maldad, que busca
deshacerse del otario,
que mata sin crueldad, esa parte que es mas
que la que puedo nombrar, que apaga aquel sol,
porque las persianas deben cerrar,
eres blanco fácil, si el cazador es igual y similar,
que hay de diferencia mas que papeles de colores,
no somos superiores por portación de mayores,
y has de ser un sacerdote si pretendes ganar dones,
no se gana nada ante la soberbia de querer por capricho,
no se gana nada ante el quitar por necesidad...
Hay un bien hay un mal... y ya no se sabe por donde estar
aprieta rápido el gatillo que el mas rudo ganara,
ante la derrota subirás al estrado sin piedad
quedaras por tu maldad, que no importa cual era ya.
Se ha convertido en sobrevivir, porque el vivir cuesta cada día mas
se oprimen las palabras, y se desata la mano propia...
¿Cuánto mas hay que saborear?...