En la fragua se atisba
el silencio del monte,
y muy cerca se esculpe
bello oleaje del mar.
Encendidas las miradas.
Apasionado momento
el instante del encuentro. . .
Intenso, mutuo palpitar.
Aliado cielo cómplice,
manto negro de la noche,
nos cubre. . .Y sin derroche. . .
Es nuestro tiempo de amar.
Autor: Graciela Beatriz Traverso-