Ya el cuerpo esta en agonia,
en suspiro suave y languido,
con un corazon algido de latir,
y el cansancio como flor marchita,
dejando atras toda una vida vivida,
y el amor en recuerdo por nunca olvidar,
con sentimiento de pena por las horas que faltan,
y es el destino mi enemigo,
que llega sin avisar queriendo mi vida,
y el transcurso del pasado queda en vivencias nada mas,
por lo tanto, y la muerte que viene en silencio de acecho,
por la proximacion vivida de toda una vida correcta,
y mi alma apenas fuerte como un rayo que cae sin rumbo,
y la muerte que viene y yo que la espero... espero su llegada.