\"Tengo mucho que hacer:
cosas que siempre he dejado para el futuro,
cuando pensaba que la vida era eterna;
cosas por las que perdí interés
cuando creí que la vida no valía la pena.\"
VERONIK DECIDE MORIR.
Paulo Coelho.
La densa noche se fue adentrando en su historia, las frías paredes serian testigo de sus sentimientos. Paso a paso. Un respiro en cada pestañear; un deseo, un anhelo en cada palpitar.
Dejo que su corazón comenzara a latir sentimientos, que temblasen las líneas del encanto con el toque de sus manos. Impulsada por su corto tiempo estimado de vida.
Recuerdos que surgieron de su inconsciente, barreras que comenzaron a caer.Permitiéndole a su interior volver a sentir.
Odiando a lo pasado, a lo lejano,
A lo cercano, a lo distante,
A lo bello, a lo alegre,
A su vida...
Llevando a su cuerpo consigo a derramar sentidos sollozos, sintiendo como resurgía en su vida el amor.
Lamentaba el haber creído que su existencia dependía de lo que ella podría hacer para acabarla.
[Palabras escritas en el viento, Retornando al camino...]
Del dolor nació la más bella sonata, aquella que expresaba su lamento; el decoro en su interior.
Retumbando en las paredes de la habitación; regresando hacia ella, conmoviendo sus sentidos.
Sumergiéndose en el sueño nocturno, en los desvaríos astrales.
Cantándole a la luna, siendo oyentes las estrellas y haciendo a estas sentir envidia.
Cantándole a las montañas de la noche, que no ve pero permanecen allí.
Dejando que su locura pasiva recorriese cada rincón, que las notas bailen al compas.
Que sus manos destilen pasión, que su corazón encuentre al amor.
Envolviendo a la noche en sabanas de melodías; almohadas armoniosas, locuras pasivas.
Descubriendo a lo secreto,
Adentrándose en un misterio.
Ese misterio que se revela
Cada vez que su mente y corazón
Se dejan mecer en cunas de encantos,
En pianos serenos, en frías noches de invierno.