El mundo está lleno
de luces y sombras,
de bestias salvajes
y bellas personas.
De ranas que saltan
en lagos y estanques
y lotos tranquilos
que gozan y flotan.
De abejas que vuelan
del tilo al naranjo,
y miel deliciosa
saciando caprichos
que endulza las cosas.
De anzuelos y cebos
que esperan la pesca,
y peces tozudos
que nadan y piensan
cerrando su boca.
De besos sinceros,
que nobles y crédulos
achican tristezas
parando las horas.
El mundo esta lleno
de espinos y nubes
de tronos y reinos,
de hoces y coronas.
Y de ogros malvados
que son perdonados
y salvan doncellas.
De falsos príncipes
que hurtan, ladrones,
que agreden al pueblo
y violan las leyes
igual que a las damas...
y el rango les salva.
El mundo está lleno
de hermosos castillos,
pudientes y clásicos,
con torres y almenas,
y sucias mazmorras
que albergan torturas,
sadismo, injusticia,
donde el mal impera.
De cálidas chozas
de barro o madera,
donde habita el amor
aunque un hambre inmenso
se aferre a su puerta.
El mundo está lleno
de envidia y soberbia,
de Otelos y Troyas,
de gris y colores,
de puentes y norias.
De engaños y orgullo,
de olvido y memoria,
de gula indomable
que azota los mares
con tóxicas cargas
añadiendo escoria.
El mundo está lleno
de amos despóticos
y siervos cansados
que amasan la harina
cargando sus penas.
El mundo está lleno
de falsas palabras
e injustas condenas
de afiladas dagas
y puños que arrean.
El mundo está lleno
de manos atentas
que curan enfermos,
y mentes dispuestas
que educan y enseñan.
De ilustres labores
que claman avance
en tantos lugares,
y seres valientes
que arriesgan su vida
faltos de pereza.
El mundo está lleno
de suma codicia,
de arcas repletas
con cuadros y joyas
que jamás se tocan.
De dioses diversos,
de signos y túnicas,
de miedo castrante
que azota y ahoga.
El mundo está lleno
de celo asesino,
que rompe parejas;
de tuertos y quejas.
De rabia iracunda,
que incendia pajares
sin contemplar antes
si en ellos había
dormidos amantes.
El mundo está lleno
de gloria y fracasos,
de trampas urdidas
que traen derrotas,
y logros perdidos
que andan repartidos
por toda la historia.
De triunfos banales
que nunca aleccionan
y trabas diversas
que portan victorias.
El mundo está lleno
de ojos lujuriosos
también vanidosos
y mentes perversas.
De entregas gentiles
y nobles esfuerzos.
De fatiga y callos,
y osamentas rotas
de otros pasajeros.
El mundo está lleno
de lujo y riquezas
que oliendo a miseria
usan vestimentas,
y alegres pobrezas
que se disfrazaron
con feos harapos
y por ser honradas
y también honestas
logran realeza.
El mundo está lleno
de graves errores
y flechas certeras,
de pesos livianos
y dudas que quiebran,
de sueños efímeros,
y de otros que quedan.
Es todo lo habido,
aquí, en este mundo,
respuesta contada
llena de sentido;
la diestra herramienta
que aprieta tornillos,
o llave que cabe
despierte la lógica,
poniendo derecho
lo que estaba curvo.
Podrían los hombres
hacer razonando,
labrar buen futuro,
oír bien atentos,
leer comprendiendo
las suertes pasadas
que azotaron siglos;
no más observarse,
con mirar absorto,
su pequeño ombligo.
El mundo está lleno
de mares y pozos,
de negros y blancos,
de escudos y lanzas,
de enormes defectos
y grandes virtudes.
Repleto de vida,
concede y cercena,
él es previsible,
contesta oportuno,
él es sorpresivo,
sin que tú lo esperes
tanto sesga alianzas
como ata sin nudos.
El mundo está lleno
de cuerdos y locos,
de absurdas razones
que rompen futuros,
y tantas locuras
dichas desvaríos
que andan encerradas
y asientan caminos.
El mundo está lleno
de sabios ancianos
y necios adultos.
de sexos castrados
y de vicios ocultos,
de violentas guerras
y paz armoniosa
que acude tardía,
de abrazos estrechos
que al ser reconfortan
y bombas malditas,
de insípida charla
del todo baldía,
y de hondos silencios
que al ser resucitan.
De mucha inocencia
guardada en los niños
e insalubre astucia
que tercia a hurtadillas.
El mundo sostiene
un grandioso dado
cargado de ingenio,
que salta descarado
e inventa partidas.
El mundo es un globo
que rueda y levita
en el ancho cielo,
repleto de frutos
reparte sabores
y tactos diversos
y formas plurales.
No quiere el destino
ser punta de aguja
que acierta a pincharle,
sí extender su tiempo
y hacer que sus vueltas
construyan piruetas
de magia circense
y embrujo elogiable.
318-omu G.S. (Bcn. 2014)