Háblame
Que no se acalle tu voz, poeta
y describe con tu esencia
lo que parece olvidado.
Háblame del amor
que es la esencia de la vida;
de sus retazos sublimes,
de su innegable ternura.
Háblame de la fe
que anida en el corazón,
la que mueve las montañas
y recibe la esperanza.
Háblame de los sueños,
encontrados y perdidos,
de su cincel que modela
para crear la belleza.
Háblame de la paz,
de ese rumor de cascadas
que es la fuente de la vida
en la existencia del hombre.
Háblame poeta, háblame…