Peregrina

EN SU REGAZO

 

En su regazo dejó sus ansiedades,

en su regazo olvidó sus inquietudes

al deslizarse suavemente la caricia

que le llevaba más allá de cielo y nubes.

 

En su regazo una lágrima rodaba 

reconociendo aquella inmensa dicha 

del probo, íntegro amor que profesaba 

en lo profundo aquel ser que tanto amaba.

 

En su regazo se posaron los ensueños

que se cumplieron al instante, en breve lapso, 

al fusionarse en un solo sentimiento 

tersos silencios del amor correspondido.