Aléjate de mí bestia sanguinaria,
Ya no clavaras más tus garras en mi piel.
Huye, mientras te quede aliento
Porque viene por ti la muerte sigilosa
Acechando cada movimiento de tus sucios pies,
Márchate.
Refúgiate donde ni tu sombra te halle,
Porque hasta ella misma te busca.
Desaparece de este universo
Corre, vuela, nada
Haz lo necesario para pagar tu deuda,
Ni con el sudor de tu alma podrás saldarla.
Hiciste mucho daño, mi alma heriste.
Ya no tengo cura.
No existe medicina
Para tanto dolor.