Cuánto, cuánto me ha dolido
Que te hayas ido de aquí,
El haberte conocido
Fue la muerte para mí;
Si ya tanto me has herido,
Si ya todo lo perdí,
¿Por qué no llega el olvido
De tan loco frenesí?
Ven y dale a mi destino
Razones para vivir;
Mas, si ya hallaste otro sino
Con quien quieras tú seguir:
Ven a cortar mi camino;
Después, tú podrás partir…