El amor cuando se va, no nos avisa
ni se despide con un beso;
extiende sus alas, emprende vuelo
como paloma que busca otro árbol
para hacer su nuevo nido.
El amor cuando se va deja como huella
una estela de oscura luz ,
un corazón sangrante de dolor
y una fatal desesperanza.
El amor se va entre la bulla del silencio,
o se esconde bajo la nube del olvido.
El amor cuando se va, no se va solo,
viaja con él un séquito de lágrimas
y esas lágrimas se estancan en el alma.
o se pierden en las tinieblas de un sepulcro.
Eugenio Sánchez