NO ME ABANDONES
Penurias y azotes mis hijos sufren con dolor,
Por viles impostores que vestidos de un color,
Con sangre han mancillado la inocencia y el clamor,
De los que hoy luchan por verme libre de las garras del opresor.
Humillada me he sentido por el impotente dictador,
Que insiste en destruirme y despojarme del valor,
Que sienten los que quieren verme de nuevo en mi esplendor,
Y rescatar de las cenizas la flama de mi honor.
No me abandonen se los pido yo los cubro con mi piel,
Ésta que aunque desnuda con dignidad sabrá defender,
Todos sus ideales de mi nuevo renacer,
Donde florece la esperanza de verme libre otra vez,
Y dónde todos unidos podemos la paz obtener.
(Thenamora )