victolman
Sin control
Hoy no tengo más control
para enfrentar esta desidia,
son los golpes de la vida
que así el destino arraigó;
parajes de este tiempo
que llegan en su momento,
cursando solo el destino
por el cual Dios lo estableció;
¡Oh, alma mía!
Fortaléceme de este lamento
ya no deseo esta agonía,
ni de este duro tormento;
Fuerte…
Muy fuerte es este sentimiento
que arranca mis entrañas,
despoja el alma de mi vida
y la estruja cada mañana;
¡No sé qué hacer!..
Me siento lapidado…
Tan solo,
si Dios estuviera de mi lado
mi alma se reconfortaría,
yo quisiera entender
¿El por qué?
¡El porque te fuiste
hija mía!..
(victolman)