No importa a qué lugar
Se dirijan tus pasos
Que no escuche tu voz…
Ni te mire a los ojos…
Yo sé de tu tristeza,
Aletea en mi pecho,
Buscando refugio
Fugitiva y exhausta.
Porque sabe a ciencia cierta
Que puedo abrazarla.
Amigo mío…
No importa que caminos
Recorran tus pies,
Que no escuche tu risa
Ni te tome las manos
Yo sé de tu alegría
Porque repica en el viento,
Despeina mis cabellos
Y me besa los párpados.
Amigo mío…
No importa
Si no puedes explicarme
Qué extraños sentimientos
Pueblan tu corazón
No importan las palabras,
No escribas, no hables,
Lo que sientes late
Aquí, en mi corazón.
Si a tus ojos un día
Asoma una lágrima
y no puedes entender
cuál es el motivo…
déjala silenciosa
rodar por tu cara,
es mi alma que te extraña,
“amigo mío querido”