Peregrina

SU ESTRELLA

 

 

Bien le ha valido la pena

por largo tiempo aguardar

al ver que al fin ha logrado

su anhelada estrella alcanzar.

 

Con vehemencia la buscaba,

en su mente la vislumbraba,

aparecía y se le esfumaba,

y todo lo que lleva dentro

en lo hondo se guardaba.

 

Brillaba en su pensamiento,

titilaba en el firmamento,

latía fuerte su ardiente pecho,

deseando tanto aniquilar

el tedio del terrenal tiempo.

 

El destino ha decidido

que aguardar no debe más,

ha ocurrido dulce encuentro

y con creces ha colmado

su prestancia y serenidad.

 

Oh, cuán preciada estrella,

a su lado se encuentra ya,

y siente cual si estuviera

en el Paraíso Terrenal.