Al mirar el reflejo de la luna
De la oscura agua nació una perla,
Pintada con el alma de aquella
Sirena con voz honda y eterna.
Y la doncella esa noche cantaba
La melodía que el corazón ahogaba
Cuando las estrellas olvidadas
No besaban una luna desolada.
Dejadme en el abismo encantada
De las lagrimas que el océano tocaba
Cuando de tu lado fui alojada
Para cantar con una sirena abandonada.