Habría que comparar si uno o dos
Son más que tu y yo en un sofá,
Si el producto de usted por mi
Es realmente la palabra.
Dividamos por un momento el “mi” del “ti”,
Quedémonos solamente con los rostros,
Miremos alrededor y burlémonos de nada
Y que nada más pase por aquí.
La pared que cuelga de tu reloj
No es más que un pretexto
Para salir de ti y poder regresar.
Ya ves, uno y dos pueden ser cursis
Y números a la vez, pero no pueden ser
Uno o dos si hablamos de ti y de mi,
Sino que nada podemos más que tú o yo.