Amatlam

**Hasta que no seas tuya***

Me reprochas no quererte,

y me dices que me amas,

que si amase como lo haces,

tu reproche  sería nada.

 

Hoy regreso pa´ decirte,

que  se agotan mis palabras,

al inicio te escribía,

detallando que te amaba,

 

sin embargo te recuerdo:

cargar peso, siempre cansa,

y hasta ahora es que te veo,

con tu desnuda alma apresada,

 

Acomprendo las vastas cosas,

que bien pensé que me faltaban,

te lo dije muy desde antes,

las cicatrices de mi alma.

 

me dijiste eso no importa,

las tocaste y las besabas,

yo también tengo las mismas,

me repetiste con tu mirada.

 

Paso el tiempo y voy sanando,

antes de toda esta gran calaña.

te pedí claro, también trabajes,

las cicatrices que tú llevabas.

 

Hoy que te veo muy claramente,

y las heridas ensangrentadas,

se han abierto ya nuevamente,

me engañaste que las curabas.

 

No me confías y no me sueltas, 

empolvadas te veo las alas,

alas tristes que ya no abres,

alas traumadas y lastimadas.

 

ya no puedo, aunque quisiera,

explicarte como me atas,

el amor no son cadenas,

es volar los dos al alba.

 

¿No recuerdas lo que se siente?

has caído desplomada.

Síi, te entiendo, fácilmente,

también mis alas fueron quebradas.

 

Mas los vientos son mi suerte,

ellas aman ser usadas,

si, me pides que te comprenda, 

y te comprendo con toda el alma.

 

Hoy ya frente hacia tus ojos,

con salinas en tus pestañas,

tormentosa me preguntas,

que en tu pecho algo te mata.

 

¿Cómo le hago vida mía?

es que me duele, me despedaza,

como le hago para apagarle,

!a esos fuegos que me devoran las esperanzas!..

 

Aquí empieza vida mía,

mi palabra, mi consejo,

mas no creas toda mi rima,

es mi forma así de verlo.

 

Has de cuenta e imagina,

que albañil te toco serlo,

y estas en medio de tu casita,

casita hermosa, no por pequeño.

 

 

Estas centrada y le ves clara,

miras arriba y no tiene techo,

medio pintada , llena de arañas,

sucia de escombros, llena de huecos.

 

Esa es tu casa, se esta cayendo,

así a quedado por tantos vientos,

por terremotos, rayos, tormentos,

y otros desastres grandes, pequeños.

 

Ahora mi niña,

ves hacia el suelo,

también quebrados fisuramientos,

 

Pero a tu lado,

tienes los bloques,

y una cubeta con buen cemento,

 

Tú tan hermosa,

viste mi casa,

también desecha,

también sin techo.

 

Y como amas,

como una diosa,

la reparabas,

con tanto empeño.

 

Ahora comprendo que es lo que pasa,

compartes siempre de tu cemento,

si ves las casas todas marchitas,

vas y reparas sin miramientos.

 

Así que nena ya vi la falla,

“mi albañil de buen concreto”,

me has ayudado tanto en la casa,

pero la tuya sigue cayendo.

 

No seré tuyo 

Porque primero,

tú eres tuya,

Y te falta eso.

 

No te hago falta,

ni nadie más,

te faltas tú,

amarte más.

 

Ahora mi vida escucha esto,

esa cubeta con el cemento,

es el amor que tu repartes,

es el amor que llevas dentro.

 

Esa cuchara que mueves habil,

Como el pintor usa su lienzo,

con que reparas imperfecciones,

es tu altruismo, tu ser entero.  

 

Esa casita, mi vida hermosa.

si te das cuenta, esta latiendo,

allí has vivido y estas viviendo,

tu corazón, esta cayendo.

 

Ya veo tus ojos,

muy bien abiertos,

y me da risa tu rostro bello,

 

Esta sorpresa de no saberlo,

se ve tan fácil comparamiento,

pero mi vida ¡si que te entiendo!

cuando estas mal, no es fácil verlo.

 

Así que ve, mi buena niña,

cuchara en mano toma cemento,

toma tu amor, virtud y anhelo,

y haz de tu casa tocar el cielo.

 

Con la experiencia,

entre tus dedos,

has tu castillo, 

un lugar nuevo.

 

Ponle jardines, fuentes, abetos,

solo no olvides que estoy en ello,

yo también tengo: bloques, cemento,

no estás solita.. va!, repellemos!

 

Ya dicho todo, ya dicho esto., 

ah! ,hay un alivio que calma el pecho,

no te apresures, toma tu tiempo, 

el corazón es muy complejo,

 

Aquí estaré velando sueños,

aquí te espero en tus recesos,

recuerda siempre no soy tu dueño,

pero en mi casa ya estas viviendo.

 

ah!, también recuerda, se me pasaba,

ven por las tardes, por las mañanas,

quiero limpiarte, curar tus alas,

desempolvarlas, reconquistarlas.

 

 vez que hermosos atardeceres,

entre los bosques de las montañas,

volemos juntos, abre tus alas,

el arcoíris bajo la lluvia.