Me vomitó la noche en madrugada sin dormir...en retirada de tus muslos,
mis pasos de adoquín y barro bordean la cordura de existir.
Desde el vientre abandonado, mis manos a ciegas tantean la esperanza
de amanecer en tu salvaje pelo,
extendido al viento sobre la almohada perfumada ,
pétalos de rosas, lavanda embriagadora,
sabor a miel de tu boca, en mis labios agrietados,
hambrientos de tu piel.
Sobre las sabanas arrugadas de la espera,
húmedas de vigilia,
la soledad encoge mi cuerpo que quiebra en grito de impotencia,
y llanto agarrotado en la garganta.
¡Soy yo o es Él! ¿Quién Soy ? ¿Quien fui?
¿Y quien seré? Cuando la noche caiga sobre mí ...