Como un lamento
El viento irreverente
Soplando de “ Garbi”
Llena de sal y olor a mar
Los corazones las almas
Lejanas en pensamientos
Que vienen y van
Como una procesión
De pasos inquietos
Y juguetones
La calidez de la farola
Abriga los desiertos
De un paseo inquieto
Grillos chillones
Acompañan el ocaso
Prolongado en la noche
Donde viajan tus anhelos
Escondidos y olvidados
Hace tiempo
Se alejaron callados
Desterrados en la arena
Caprichosa y escurridiza
Quizás bañados en sal
Quien sabe
Mientras tu corazón
Sueña
En los mares de ilusiones
De principios sin final.